Nuestra estancia fue excelente especialmente cuando dos miembros del equipo nos invitaron a tomar unos vinos en un wine tasting. Nos pasamos unas horas increíbles, nos contaron interesantes detalles acerca de Barcelona y nos complacieron mucho.

Gracias.

¡Es un lugar maravilloso para quedarse! La decoración del lugar es preciosa y la cama es muy cómoda. Además, todo estaba muy limpio. El cuarto de baño era amplio y la ducha nos encantó. El desayuno estaba completo y a un precio razonable ?.

El personal del restaurante y el menú de navidad fueron excelentes. Sin embargo, comunicamos a la dirección que están incumpliendo la normativa al tener una temperatura de 26,5 ° en lugar de 19°.

Decidimos irnos debido a que la experiencia no fue como esperabamos. La caminata hasta la playa era de alrededor de 10 minutos y también hasta la Villa Olimpica donde encontramos una variada oferta gastronómica.

Lo recomiendo por su excelente ubicación. A poca distancia se puede llegar andando a todas partes y hay un ambiente muy animado tanto de día como de noche.

La habitación era cómoda, pero el aire acondicionado se encendía automáticamente a 17ºC sin que nadie lo modificara. El baño estaba genial, aunque necesitaba algún retoque (acabados, pintura, materiales, etc muy deteriorados).

Visite este lugar en 2 ocasiones, 3 noches cada vez entre el 31 de mayo y 13 de junio de 2019.

Una experiencia maravillosa, el personal fue increíblemente acogedor, las zonas comunes eran cálidas con servicio de bebidas, como agua, café y té, todo incluido en el precio de la habitación.

Las habitaciones son realmente cálidas y limpias, ¡y el lugar cuenta con una maravillosa terraza desde donde se pueden disfrutar el sol y la música mientras se come o se toma algo! El equipo del lugar es sumamente amable y servicial.

Elegante, tranquilo e impecable, estaba súper limpio. El hotel está en una zona concurrida por la noche pero la insonorización es perfecta, no se escucha el ruido del exterior.

La habitación que me tocó estuvo ideal! Limpia, espaciosa, cómoda y con un pequeño balcón que ofrecía unas vistas maravillosas al Parque de la Ciutadella, uno de los barrios más emblemáticos de Barcelona.

Me alojé en el Hotel Lyon de Barcelona y fue una experiencia fantástica. Todo estaba muy limpio y el personal era muy amable. La ubicación era perfecta y se tardaban unos pocos minutos en llegar a la Plaza de Cataluña.