Hotel Margot House Barcelona

Nuestra estancia de una noche en este hotel boutique fue simplemente perfecta. Estábamos de escapada en pareja y, afortunadamente, encontramos este lugar situado frente a la casa Batlló y a solo cinco minutos caminando de Plaza Cataluña. Desde el momento en que llegamos, pudimos notar que cada detalle estaba cuidado para que nos sintiéramos como en nuestra propia casa. A pesar del ajetreo de la zona, al entrar en el hotel nos sorprendió la tranquilidad y serenidad que se respiraba, lo que creaba un ambiente ideal para relajarse y desconectar. La habitación en la que nos alojamos (superior) era impresionante; elegantemente decorada, con una de las camas más grandes y cómodas en las que he dormido y un baño enorme con una gran bañera y plato de ducha. También queremos destacar la amabilidad, simpatía y profesionalidad de las recepcionistas que conocimos durante nuestra estancia, quienes nos mostraron las instalaciones y nos ayudaron con todas nuestras preguntas. Además, nos dieron una cálida bienvenida con un pequeño detalle en nuestra habitación. Por último, el desayuno fue una gran idea, ya que estaba hecho con productos frescos y de calidad, y preparado en el momento. Si alguna vez regresamos a Barcelona, no dudaremos en volver a alojarnos en este establecimiento. ¡Fue una experiencia magnífica! ¡Gracias!

Experiencia inmejorable en un hotel con nueve habitaciones, ubicado perfectamente en Barcelona y con excelente insonorización. Mi habitación era amplia, luminosa y muy cómoda, con una cama grande y hermosa decoración. Además, agradecí mucho que incluyeran bebidas en la habitación. El equipo siempre estuvo disponible y nos dieron una cálida bienvenida. Sin duda volveré a este lugar en mi próxima visita.

Nuestro alojamiento en Barcelona fue único. La decoración elegante y sofisticada nos encantó, aunque en algunas áreas puede ser un poco excesiva, especialmente en la iluminación que es demasiado tenue. Sin embargo, el aislamiento acústico es perfecto, no se escucha ni un ruido a pesar de estar ubicado en pleno Paseo de Gracia. El personal fue extremadamente atento y siempre pendiente de nuestras necesidades, brindándonos un toque de clase adicional a nuestra estadía.

Nos encantó nuestro hotel. Era un lugar pequeño y muy acogedor, con un personal extremadamente amable y cercano. Las habitaciones eran amplias y cómodas, y los espacios comunes eran tranquilos y acogedores. La ubicación era espectacular, sin duda volveremos a hospedarnos aquí.

Nos alojamos en un boutique hotel en pleno corazón del Eixample, justo en la primera planta del Passeig de Gracia. Las habitaciones y los espacios comunes eran un preciado homenaje a esta ciudad. Los muebles, la decoración y la organización eran tan estéticos como relajantes. Nuestra habitación estaba justo enfrente de las Casas Battlò y Amatller, y resultó ser más de lo que esperábamos: espaciosa, luminosa, con una cama súper cómoda, dos poltronas y una mesita para relajarse y disfrutar de la vista desde sus amplias ventanas. También había una sala de baño espaciosa con ducha doble y bañera donde relajarte. Además, entre las comodidades se encontraban publicaciones de diferentes temas, una máquina Nespresso y un frigo bar provisto de lo esencial. El servicio de habitaciones, disponible las 24 horas, fue muy útil y cómodo. El personal era profesional y amable, destacando la atención de Andrea. Tuvimos una maravillosa estancia, y sin duda esperamos volver la próxima vez que viajemos a Barcelona.