Hotel America Barcelona

Sin duda el mejor lugar para estar. Excelente servicio, el personal siempre disponible para ayudar. El desayuno muy completo. Los cuartos son grandes y modernos, con amenities de buena calidad. El precio es el anunciado. Además, nos dieron excelentes sugerencias para mejorar nuestra estadía en una ciudad increíble. Está cerca de todo y en su terraza se siente una tranquilidad especial que hace olvidar que estás en medio de una ciudad. Sin duda mi mejor opción.

Nos alojamos en una ubicación privilegiada de Barcelona, estando a poca distancia de restaurantes y paradas de metro. La atención recibida fue estupenda y el nivel de limpieza era excelente. El único inconveniente fue el ruido que se escuchaba del pasillo, lo cual dificultó mucho el descanso.

Estuvimos en la piscina y en la terraza roof, vistas inmejorables. Fue un placer conocer al dueño de este lugar, una persona optimista y luchadora a pesar de las circunstancias. Nos trato genial tanto él como el servicio de la terraza, queremos mandar todo nuestro apoyo a él.

Me alojé en este Hotel de 4 estrellas y el primer día me dieron una habitación preciosa. Pero su limpieza era mala: en la cajita de los azucarillos del café todo estaba abierto, los envases vacíos y sin cambiar, los vasos usados y en el baño los cristales sucios. Las paredes eran de cartón y se escuchaba todo, ya que justo debajo de mi estaba la zona de bares que hasta la 2 de la mañana tenía un jaleo en la calle. El hotel es moderno y con mucho lujo, pero tiene sus fallos. A la hora de ducharse, al caer una gota de agua o con la condensación del vapor de agua, se daba un chispazo en el baño que te dejaba tieso. Además, los grifos del lavabo estaban cubiertos de cañerías de acero inoxidable que no se habían limpiado desde el día que se construyó el hotel. Limpieza nefasta... Camas cómodas, pero no recomendable para estancias prolongadas.

No aconsejo este lugar. Cuando llegas dicen una cosa y al final es otra. Es muy pequeño, sin ningún tipo de servicio. Anuncian sauna y gimnasio 24 horas, pero para usarlo hay que pedir una tarjeta en recepción y reservar porque solo se puede utilizar por una persona. La habitación es muy incómoda, el colchón está muy gastado. Las habitaciones "sweet dreams" son una ratonera, sin espacio para nada. Además hay cámaras en todos lados, incluso en los pasillos. Los artículos de aseo son buenos, pero en botes grandes y si te los llevas se te cobra 15 euros. No dispone de cepillo de dientes, maquinilla de afeitar o peine. Está mal comunicado, no dispone de transporte público cerca ni está conectado con Sants o el aeropuerto.